Según las asociaciones el ayuntamiento madrileño, que ha basado esta iniciativa la máxima "quién contamina paga", ha eliminado la tasa que gravaba los impuestos a las empresas que más basura generan y va a cobrar la tasa por el valor catastral de la vivienda, sin tener en cuenta la basura producida por los vecinos, lo que significq que esta tasa es simplemente recaudatoria y no medioambiental.Las asociaciones vecinales consideran que este afán recaudatorio se está dando por el agujero de 7.000 millones de euros que ha ocasionado la política de Gallardón, sobre todo las obras "faraonicas" y las olimpiadas.
Según el Ayuntamiento de Madrid esta tasa es necesaria por la bajada de los ingresos y porque los servicios de basura hay que pagarlos. En realidad desde el año 2.002 los ingresos del ayuntamiento han pasado de los 2.000 a los 5.000 millones de euros al año y además el servicio de basuras no va a variar en su funcionamiento, ni se va a incrementar la plantilla, por lo que el ayuntamiento va a cobrar a los ciudadanos por un servicio que no va a ofrecer.
Las asociaciones de vecinos han llamado a manifestarse contra esta tasa y animan a los ciudadanos madrileños a no pagar esta tasa.
