No podian faltar....El Pontificio Consejo para 'Justicia y Paz' del Vaticano, presidido por  el cardenal Peter Turkson, ha propuesto la creación de una Autoridad  Política Mundial y un Banco Central Mundial para favorecer "mercados  libres y estables, disciplinados por un cuadro jurídico adecuado" frente  a la actual crisis económica y financiera que padece gran parte de  Occidente...
El Pontificio Consejo para 'Justicia y Paz' del Vaticano, presidido  por el cardenal Peter Turkson, considera "surrealista" y "anacrónico"  que se mantenga con la globalización el orden internacional nacido de la  Paz de Westfalia (1648), por lo que reclama que los Estados cedan de  manera gradual parte de sus soberanías a una Autoridad Política Mundial y  un Banco Central Mundial. 
 
Según la propuesta, la Organización de las Naciones Unidas sería la encargada de crear esta autoridad mundial.
 
Sin embargo, esa suerte de Autoridad ya existe con el Consejo de Seguridad, que es el que realmente conduce a la ONU.
 
En todo caso, implícito en la propuesta del Vaticano estaría una  reforma a los estatutos de la ONU, algo que reclaman los países que  quieren ingresar al Consejo de Seguridad (Brasil, Alemania e India).
 
Pero la propuesta del Vaticano apuntaría más que a un Consejo de Seguridad ampliado a una estructura más ejecutiva.
 Según ha explicado el dicasterio vaticano, esta Autoridad Política  Mundial debería tener "un horizonte planetario" al servicio "del bien  común", aunque ha precisado que esta autoridad "no puede ser impuesta  por la fuerza, sino la expresión de un acuerdo libre y compartido" entre  los países. 
 
"El ejercicio de una autoridad así tendrá que ser necesariamente supra-partes", destacó la nota publicada por la Radio Vaticana.
 
Así, la Santa Sede ha subrayado que los gobiernos "no deberán  servir incondicionalmente a la autoridad mundial" sino que, por el  contrario, debe ser esta autoridad "la que se debe poner al servicio de  todos los países miembros, según el principio de subsidiariedad".
 
 El Vaticano ha recordado que el objetivo de esta autoridad será  "crear mercados eficientes y eficaces para que no estén protegidos por  políticas nacionales paternalistas" y promover "una equitativa  distribución de la riqueza mundial" mediante "formas inéditas de  solidaridad fiscal global".
 
No obstante, el Vaticano ha precisado que "todavía queda mucho  camino por recorrer antes de crear una autoridad pública con competencia  universal", aunque ha recordado que será necesaria "una previa práctica  del multilateralismo". 
 
El objetivo de del Banco Central Mundial sería "crear mercados  eficientes y eficaces para que no estén protegidos por políticas  nacionales paternalistas". 
 
En opinión del Vaticano, el Fondo Monetario Internacional (FMI) "ha  perdido su capacidad de garantizar la estabilidad financiera global",  por lo que es necesaria la creación de un banco central mundial.
 
Este organismo "regularía el sistema de los cambios monetarios" y  las actividades "bancarias y financieras" basándose en "lo espiritual y  la ética". Entre sus funciones estaría imponer tasaciones a las  transacciones financieras para la constitución de una reserva mundial  que ayude a los países en crisis.
 
Además de apoyar esta 'tasa Tobin' (a la que se oponen USA y  China), el Vaticano también condiciona la recapitalización de los bancos  con fondos públicos "a comportamientos virtuosos y con el objetivo de  desarrollar la economía real".
 
El Vaticano asegura que el liberalismo económico "sin reglas y sin  controles" es una de las causas de la actual crisis económica y ha  denunciado la existencia de mercados financieros fundamentalmente  especulativos, dañinos para la economía real, especialmente para los  países débiles".
 
La crisis económica, agrega este documento de 41 páginas inspirado en la encíclica de Benedicto XVI "Caritas in veritate", está causada por el utilitarismo, el individualismo y la tecnocracia, "tres ideologías que tienen un efecto devastador".